Madrid, verano de 1938. A dos años del inicio de la guerra civil española, la capital de España sigue bajo control republicano. Durante la madrugada, las balas de un francotirador acaban con la vida de dos milicianos. Pocas horas después, el capitán Matías y los suyos descubren que el asesino ha sido un chaval que, empeñado en vengar la muerte de su hermano falangista, todavía sigue encerrado en la vivienda desde la que ha disparado.
Algunos de los compañeros de Matías quieren subir a por él y pegarle cuatro tiros, pero el capitán desea darle una oportunidad. Sin embargo, el chico se niega a rendirse. Solo tiene 15 años. Y no tiene miedo a la muerte. Porque el único momento en el que no se tiene miedo a morir… es cuando casi no se ha vivido.
15 es una historia de la guerra civil española basada en un hecho real. Pero también es una historia sobre todas las guerras y en lo que convierten a quienes luchan en ellas. Alejandro es el quinceañero supremacista blanco que mató a dos personas en una manifestación en EE.UU., es el terrorista yihadista menor de edad, es cualquiera de los adolescentes que reclutaba la banda terrorista ETA.
“Esta historia es una obra de teatro camusiana que tiene por escenario una plaza de Chamberí, en el Madrid sitiado de 1938. En la primera media docena de páginas alguien muere, y para una historia que comienza así no se puede augurar un final feliz. En sus viñetas expresionistas no encontrará el lector los lugares comunes de la guerra civil; sobre todo, verá gente acurrucada, en cuclillas, sentada bajo una lona, fumando y preguntándose por qué se muere y por qué se mata en situaciones semejantes. El devenir de la Historia lleva a veces al límite la vida de personajes como los que aparecen aquí, los alinea ante contradicciones inmisericordes. Para este tipo de dilemas, vividos en primera persona, no hay resolución posible ni final digno. Esta historia es una obra de teatro, los hechos son reales”. Alfonso Zapico
David Muñoz (Madrid, 1968) estudió Bellas Artes y, como tantos otros guionistas, es un dibujante de cómic frustrado. Aún hoy, sueña con publicar algún día un cómic dibujado por él mismo. Ha trabajado en películas como El espinazo del diablo o La posesión de Emma Evans; las series La valla o La embajada, o cómics como La casa de los susurros (Yermo Ediciones), Trackers (Yermo Ediciones), Miedo (Glénat).
El desastroso estudiante que fue durante su adolescencia jamás habría pensado que fuera posible, pero además de guionista también es profesor de guion y da clases en la ECAM y en varios másteres universitarios. Junto con Rayco Pulido es autor de Sordo (De Ponent, 2008; Astiberri, 2018), también trasladada al cine. Su última novela gráfica es 15 (Astiberri, 2021), con dibujos de Andrés G. Leiva, y prepara otra de corte autobiográfico, Infectado, también para Astiberri, con dibujos de Manuel Meseguer.
Andrés G. Leiva (Córdoba, 1969). Es licenciado en Bellas Artes. Trabaja desde hace veinticinco años como profesor de dibujo. Podría considerarse de la generación Injuve, ya que en 1998 es premiado con un accésit en el Primer Certamen de Cómic Injuve con un capítulo de su primera obra: Historia de Iván (2000, reeditado en 2015 por Bandaàparte Editores). Este hecho le abre las puertas de la edición. En la editorial Sinsentido publica El misterio de Electra / horrible hórreo (2002, obra nominada en el 21.º Salón de Ficomic de Barcelona en la categoría de autor revelación), Juana de Arco (2005, nominada a mejor obra en el 23.º Salón de Ficomic) y Evelyn, el extraordinario caso del doctor Corman (2009, premiada por la Diputación de Cuenca). Con la editorial Dibbuks publica dos álbumes: Serie B (2014) y Uno de esos días (2018), que recibe el Premio Internacional Ciudad de Palma 2017. 15 (Astiberri, 2021), es su primera novela gráfica realizada con el guionista David Muñoz.